¿Sufre usted de stress laboral? ✅
Si está sintiendo los síntomas que
voy a compartir en este post, usted no sufre de estrés laboral, está padeciendo
el Síndrome Burnout (quemado, fundido) está agotado física, emocional o mentalmente,
cuidado esto tiene consecuencias en la autoestima, usted puede perder interés por
sus tareas, el sentido de responsabilidad y puede llegar a profundas
depresiones.
Pero ¿Qué es el Síndrome Burnout
y cómo se manifiesta?
El síndrome es la respuesta
extrema al estrés originado en el campo laboral y tiene consecuencias de tipo
individual, de tal manera que perjudica igualmente a la organización. Y usted
puede ser propenso a experimentar este síndrome y no lo sabe.
Pues bien debe de saber que el
principal detonante es el entorno laboral y las condiciones de trabajo. Pues el
colaborador que está expuesto de manera continua a altos niveles de estrés,
carga de trabajo, baja autonomía, malas relaciones en el trabajo y ausencia de
apoyo en su entorno, falta de formación para desarrollo profesional, entre
otras, puede ser un buen candidato para que sufra de este síndrome. Y las causas
pueden ser exigencias excesivas que originan tensiones.
Pero, existen factores de riesgo:
La empresa: el exceso de burocratización y falta de apoyo, mal
manejo de tiempo para organizar sus labores, el jefe bombero que no planifica y
todo lo que ve en el entorno y la competencia lo quiere replicar y realizar sin
programar.
Expectativas personales: Todos tenemos expectativas respecto a nuestro
desarrollo profesional y que no se ajustan a la realidad cotidiana, provocando
que la adaptación a esa realidad se produzca de forma más lenta. Si esas
expectativas son muy altas y no se cumplen, la persona puede desarrollar
síntomas como ansiedad, apatía o tristeza, entre otros.
Y aunque no existe un perfil de
la persona que puede padecer esta afección, sí existen algunos rasgos
personales que si los tiene indica que es una persona propensa a tener el
síndrome, como es el caso de las individuos inseguros y dependientes que tienen
más posibilidades de sufrir depresión y ansiedad si tiene que enfrentar estrés y
trabajo bajo presión.
La prevención del síndrome del
trabajador quemado debe comenzar en la empresa, y debe empezar por evaluar las
situaciones que generan el estrés y ansiedad de tal manera que provea de herramientas
al colaborador para que pueda realizar su trabajo de forma adecuada y no tenga sobrecarga
laboral.
La empresa debe buscar con ello
que el colaborador asuma una actitud asertiva, estableciendo una relación de comunicación,
buscando que el colaborador ajuste su visión de la realidad laboral y que pueda
ver la situación como una oportunidad para aprender y crecer en otros ámbitos
diferentes a los que se había propuesto inicialmente.
El síndrome del trabajador
quemado puede dividirse en dos tipos:
El activo: Es el colaborador que
mantiene una conducta asertiva. Se relaciona con elementos externos a la
profesión.
El pasivo: Es el colaborador que
suele tener sentimientos de apatía y se relaciona con factores internos
psicosociales.
Este síndrome se caracteriza
porque es un proceso que va creciendo de manera progresiva si no se toman
medidas para impedirlo, perjudica notablemente a la organización. Además, puede
provocar que el desgaste laboral evolucione y alcance aspectos como los ideales
y la percepción de los logros y q medida que avanza, el colaborador puede tener
dificultades para resolver problemas y ejecutar tareas que antes le resultaban
sencillas.
La frustración comienza a estar
presente de manera constante, permanece en un estado continuo de agotamiento y
los síntomas pueden evolucionar a estados más graves. De tal manera que algunos
colaboradores pueden llegar a tener síntomas depresivos, de psicosis e incluso
tener ideas de suicidio.
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