Internet cambió la forma de cómo el 80% de la población
estudia, se relaciona, compra y accede a otros medios de comunicación. Las estadísticas
dicen que sólo en Colombia el 54% de la población usa internet todos los días,
los jóvenes entre 15 y 24 años son los que más navegan, seguido por los adultos
entre 34 y 44.
Los padres de familia se han dado a la tarea de proteger a
sus hijos de los peligros de las calles: no hablar con extraños, no aceptar ni
alimentos ni propuestas de extraños, protegerse de los maleantes, de los carros.
Pero muchos ignoran que los peligros del Internet son los mismos o peores a los
que encontraría en las calles.
Marie Laure Lemeineur, ex miembro del Consejo de Child On
line Protection del Ministerio de Ciencia y Tecnología, habló de los peligros y
las oportunidades del Internet. Hace una analogía con los peligros de las
calles, en ambos lugares hay extraños con buenas y malas intenciones,
depredadores sexuales, personas que buscan engañar, robar o crear daños… El
secreto está en saber cómo enfrentar estas situaciones.
“Nosotros educamos a nuestros niños para que salgan a la
calle y sepan cómo comportarse, es lo mismo en línea. El hecho de que estén ahí
no significa que van a sufrir daño, porque no queremos satanizar el Internet,
sino que los niños aprovechen las maravillosas oportunidades que hay en línea
pero que sepan y aprendan a comportarse para evitar exponerse y ponerse en
situaciones de peligro”, palabras de Lemeineur.
Las redes sociales son útiles y entretenidas... siempre y cuando
usted las sepa usar y les enseñe a sus hijos cómo usarlas.
Las personas se ponen en situación de peligro por
ingenuidad. Por ejemplo, cometen errores como colocar en una red social que
están solos en casa, o que están de viaje, muchos dan acceso a su información
incluida la dirección y teléfono personal, o algunas personas que en su estado
de vulnerabilidad empiezan a hablar de situaciones como: “tuve una pelea con
mis padres”, “Me siento solo(a)”, “nadie me quiere”, “Mi familia se fue toda de
viaje y quede solo en casa”, “Tengo dinero para comprar un auto”. Este tipo de
cosas son vistas como oportunidades para ser abordados por quienes pretenden
ser sus amigos.
Piense que las reglas de la vida real son las mismas del
ciberespacio; antes de enviar piense que el mundo digital es instantáneo,
recuerde que todo lo que comparta ya no es solo suyo, el mundo digital tiene un
traslado de las malas costumbres, los espacios de violencia y los problemas que
existen afuera. La solución para ella es la educación, las familias deben
hablar al respecto, discutir abiertamente los riesgos y abordar el tema del uso
seguro del Internet aunque no se sientan seguros en el tema, incluso si no
saben usar una computadora y sienten que es cosa de jóvenes deben preparar a
los miembros de su familia.
Hay personas ciberdependientes, existe el ciberacoso (a través
del chat, el correo, por medio de imágenes), existe el tráfico de imágenes eróticas
(deje algo para la imaginación, no se destape), hay adultos que se hacen pasar
por menores, hay menores que tienen el alcance de hacerse pasar por adultos, existe
el fraude electrónico (a traes de sus claves pueden ingresar a sus cuentas
personales, cuentas bancarias), el internet puede dañar sus
relacionesafectivas.
Recuerde que:
1.
No debe dar datos personales nombre completo,
teléfono, dirección, dónde estudia o lugares que frecuenta.
2.
No debe responder nunca mensajes con contenido
agresivo, sexual o que “te hagan sentir mal o incómodo”.
3.
No debe hacer citas o encuentros con personas
que conozcas por Internet sin una compañía de confianza, en un lugar público
conocido o personas que estén al tanto de la situación y puedan estar presentes,
no de oportunidades a los violadores, asesinos, extorsionistas.
4.
Si alguien lo molesta, guarda pruebas –como un
screen shot-.
5.
Tenga presente que no estás seguro del otro lado
de la pantalla.
6.
No permita a sus hijos que abran perfiles antes
de los 13 o 14 años y solicíteles la clave, para que usted tenga acceso y monitoree
a su hijo de potenciales peligros.
7.
Informe a sus hijos de las experiencias buenas y
malas del uso de las redes
