Guía para la liberación personal
Basado en el libro Los 4
acuerdos
Los toltecas eran conocidos en
todo el sur de México como “mujeres y hombres de conocimiento”, eran
científicos y artistas que formaron una sociedad para estudiar y conservar el
conocimiento espiritual y las prácticas de sus antepasados, se enseñaba una
forma de vivir que se distinguía por su fácil acceso a la felicidad y al amor,
basado en los cuatro principios o acuerdos toltecas que son:
1. Sea
impecable con sus palabras
Este es el principio más
importante y el más difícil de cumplir. Las palabras que salen de su boca dicen
quién y cómo es usted. Honra sus palabras y le honrará a usted mismo. Si honra sus
palabras, crece tu autoestima. Sea coherente entre lo que piensa, lo que dice y
lo que hace. Si así lo hace, se hace respetable para los demás y le respetarás
a usted mismo.
2. Nada
es personal
Pase lo que pase a su alrededor,
nada es personal. Ni la peor ofensa ni el peor agravio. Nada de lo que hacen
los demás es por usted. Lo hacen por ellos mismos. En la medida que alguien le
quiere lastimar, se lastima a sí mismo y el problema es de él y no suyo. Si
convierte este principio en un hábito, no necesita depositar su confianza en lo
que hagan o digan los demás. Sólo basta con que confíe en usted mismo y se de
cuenta de que usted y sólo usted es el responsable de sus actos.
3. No
haga suposiciones
La Verdad no existe. Cada uno de
nosotros tenemos nuestra verdad. Tendemos a hacer suposiciones de todo.
Interpretamos lo que vemos, oímos y sentimos bajo nuestros filtros mentales y a
menudo nos hacemos una película dramática de un problema que tal vez no existe.
No de nada por supuesto. Si tienes dudas, aclárelas. Si tiene una sospecha,
pregunte. Una vez escuche la respuesta, ya no tendrá que hacer suposiciones
pues sabrá la verdad. Acepte a los demás tal como son sin tratar de cambiarlos.
Con una comunicación clara y trasparente, sus relaciones mejorarán.
4. Esfuércese
siempre al máximo
Este principio es el que permite
que los otros tres se conviertan en hábito. Esfuércese siempre. En toda
circunstancia, de siempre lo mejor de usted. Aplique siempre el esfuerzo
correcto. Si se esfuerza en hacer más de lo que puede, gastará más energía de
la que puede y tu resultado no será satisfactorio. Si no se esfuerza, si hace
menos de lo que puede hacer, se someterá a usted mismo a frustraciones, juicios
y reproches. Asegúrese también de que, ya que se esfuerza, la escalera que sube
hacia el éxito en sus objetivos está apoyada en la pared adecuada. Si se
esfuerza correctamente será más productivo y vivirá con intensidad. Sabrá que se
esfuerza correctamente cuando disfruta con lo que hace. Cuando da lo mejor de usted
porque quiere hacerlo y no porque tenga que hacerlo.
Una vez cumpla con estos 4
aspectos puede ir en la búsqueda del equilibrio interior
Se trata de entender en primer
lugar que todos tenemos un sistema de creencias (nuestros paradigmas) adquirido
por influencia social, familiar o educacional que nos hace ver y sentir lo que
pasa de forma diferente.
En segundo lugar, de aprender que
se puede modificar nuestro sistema de creencias para poder conseguir nuestro
equilibrio interior y disfrutar del camino hacia la felicidad.
El proceso pasa por lograr
conocerse y comprenderse uno mismo para comprender a los demás con el objetivo
de ser felices sin ninguna influencia externa.
De hacerse consciente de que todo
lo que necesitas para lograr lo que quieres y deseas, está dentro de usted.
Si es impecable con sus palabras,
no se toman las cosas como algo personal, no hace suposiciones, y siempre se
esfuerza al máximo nivel, tendrá una vida maravillosa que lo controlará a usted
mismo al 100%.
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